La ciudad casi sin agua

Día 289. Desde chica he escuchado las noticias que hablan sobre el agua, sobre no malgastarla ni siquiera en sábado de Gloria, sobre bañarse rápido y también sobre no tomar del agua que sale del grifo. Supe, cuando era más grande, que la Ciudad de México está en riesgo de quedarse sin agua puesto que se abastece de la zona metropolitana y sé también que hay algunas ciudades, como La Paz, que corre el riesgo de ser la primera ciudad sin agua en México. 

Recuerdo que una de mis metas cuando jugué GAP fue justamente ahorrar agua y poner una cubeta en la ducha para no desperdiciarla mientras esperaba saliera caliente. También viene a mi mente una vez que teníamos que volver de Acapulco antes de que anocheciera y eramos como 20 y para apurarnos establecimos un baño de 2 minutos contado con cronometro. 

Ninguna de las advertencias que había escuchado antes pudo tener tanto impacto en mí como el visitar una ciudad del mundo casi sin agua, Ciudad del Cabo. Este año ha sido de los más fuertes para ellos en esos términos, pues se han forzado a crear consciencia en residentes y turistas con acciones que ya sobrepasan una campaña. 

Estuvimos allá en septiembre de este año, visitamos uno de los puntos más turísticos, el Waterfront. Ahí está una de las plazas comerciales principales, tiendas de lujo para presupuestos medio-alto-altísimo y restaurantes de los mejor calificados. Entramos para refrescarnos, pasé al baño y cuando salí veo 5 lavamanos, paso a uno, no sale.... paso a otro, no sale... tan raro... vi gel antibacterial y salí... seguimos recorriendo. Fui al baño de nuevo, quería refrescarme con un poco de agua y entonces vi un papelito debajo del grifo que decía: "Este grifo se ha apagado como parte de nuestras medidas de ahorro de agua. Respeta el agua. Cada gota cuenta". Ahí quedé en shock y algo se removió dentro de mi. 



La crisis de agua en Ciudad del Cabo es real. Los baños utilizan agua reciclada. Te inivitan a usar gel sanitizante y lavar tus manos sólo cuando sea muy necesario. Una ducha, claro, pero que sean dos minutos máximo por favor. Los lugares tienen niveles de restricción para el uso de agua y en todos, absolutamente todos los lugares, hay anuncios sobre la crisis del agua, medidas, incluso el street art advierte sobre los bajos niveles de agua en las presas. En el acuario principal hay incluso un área dedicada sólo a cuidado del medioambiente entre ellos el cuidado del agua, el reciclaje de la basura y de las energías renovables.

No sé quién lo entiende más claramente, si quienes viven ahí o los turistas, lo que sí sé es que vivir eso hace que cambie por completo mi relación con el agua. No hay día en el que no este pendiente del sanitario porque de pronto el sapo no funciona bien. Trato de reducir el tiempo que tardo en bañarme y procuro meterme desde el principio para no desperdiciarla. Cada que le bajo al sanitario pienso si podríamos ahorrar algo de agua ahí, que fuera un tanque más pequeño. Pienso en las plazas y los lugares públicos de diferentes partes del mundo donde el agua se gasta como si fuera un bien ilimitado. 

Pero no, creo que no necesitamos una campaña agresiva para cuidar el agua. Necesitamos ser conscientes de que el agua es un bien escaso, que requerimos para vivir todos los seres vivos, los elefantes requieren hasta 225 litros de agua al día y hay muchos de ellos que tienen que moverse de sus lugares por las sequías que los dejan desprovistos de este líquido. Nosotros la tenemos al alcance de nuestra mano, apenas girar la llave. Cuidémosla. En tu casa, en la casa del vecino y en cualquier lugar donde veas que se desperdicia. Es un bien universal, no individual. 



Comentarios

  1. Wow., muy profundo y real., en muchas ocasiones me declaro inconsciente de ese recurso, pero en realidad se está terminando.
    Cuidemos del agua!

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